Había un tiempo en donde juré no decolorar mi cabello. Solía recurrir a alternativas “menos invasivas”  (el sun-in fue una etapa dark de mi adolescencia) para a la larga, terminar en la silla de un colorista que reparara mis intentos desesperados de una cabellera rubia. Tres años y muchas aclaraciones después, llegué a una tonalidad que por mucho tiempo consideré “arriesgada” y que genuinamente me encanta y sin la cual no puedo vivir (yo digo que seré rubia toda la vida). Sin embargo, no es secreto que los tratamientos químicos pasan factura y tuve que descubrir a ciegas cómo recuperar la textura y vitalidad de mi cabello sin perjudicar mi color soñado. A continuación, te presentaré cuáles han sido para mi los pasos vitales para mantener el tono y la salud de mi cabello:

Atiéndete con un Profesional

Parece algo evidente, pero la mayor parte de las personas deciden irse por la opción más económica o la menos experimentada al momento de realizarse una decoloración. La realidad es que la salud de tu cabello va a depender del conocimiento del colorista y de los productos que usa: dos factores directamente proporcionales al precio del procedimiento.

Esto no significa que debas irte siempre con el profesional más caro, sino que esto te sirva de motivación para investigar a fondo:
Dónde adquirió sus conocimientos en colorimetría.

Cuáles han sido sus trabajos más recientes (instagram sirve como punto de inicio, pero te recomiendo que indagues y pidas información a previos clientes sobre su experiencia).

Cuáles son los productos que utiliza.

Cuáles son las técnicas que aplica.

Cuál es el precio por su trabajo.     

    Luego de haber encontrado al colorista que se ajuste a lo que quieres y a tu presupuesto, escúchalo(a). Si te destruye las esperanzas de llegar al platinado en una sentada, ¡no insistas! Si fuiste a él/ella fue porque confiabas en su juicio y la pigmentación de cada cabello es diferente. Un buen estilista no comprometería la salud de tu cabello por un color soñado.

«Si he de recomendar a alguien, sería a Rosa de @capelliescuela. Sin duda alguna ha sido la mejor colorista que ha tocado mi cabello.»

¡OLAPLEX!

    Olaplex es un tratamiento capilar concentrado de tres pasos (dos en el salón y uno en casa) que contiene un ingrediente activo que funciona a nivel molecular para buscar y reparar enlaces rotos en el cabello causados por daños químicos y térmicos. En español: evita la rotura de la fibra capilar durante el proceso de coloración y restaura el daño que pudo haber ocasionado.

    Para mi, estos productos son clave y generan una vasta diferencia. La única razón por la cual he podido llegar a este nivel de coloración manteniendo la textura y salud de mi cabello es por estos tres productos. Pregúntale a tu colorista si posee Olaplex (el #1 y el #2) y si los puede implementar al momento de realizar el trabajo. El Olaplex #3, sirve como una mascarilla reparadora para utilizar en casa una vez a la semana posterior al trabajo de coloración. Se consigue en Sephora o en numerosas tienditas en Instagram.

Lava tu Cabello con Agua Fría

El agua fría, funciona en el cabello de la misma manera que lo hace en la piel:

Sella la cutícula, reflejando mejor la luz y brindándole una apariencia brillante.

Mantiene la humedad, suavizando el cabello y manteniéndolo más fuerte y saludable.

Reduce el frizz, los fly-aways y la rotura capilar.

Mejora la circulación de la sangre en tu cuero cabelludo, optimizando la capacidad de absorción de valiosos nutrientes.

    Parece tonto, pero la mayoría de los estilistas profesionales te recomiendan que respires profundo y te reclines en la fría corriente en nombre de la salud de tu cabello. Yo vi un cambio notorio desde que empecé a implementar esta recomendación.

Utiliza los Productos Adecuados

Ok, sin mucho preámbulo, iré al grano sobre los productos que me ayudaron a mantener mi cordura y a preservar lo más parecido a la textura de mi cabello natural:

Mascarilla Reparadora

    Luego de lavar tu cabello propiamente, utiliza una mascarilla nutritiva. Las mascarillas son más beneficiosas que los acondicionadores regulares, ya que esta se abre paso dentro de la cutícula del cabello en vez de descansar sobre la superficie como el acondicionador. Cuando no me aplico una mascarilla casera, utilizo Olaplex #3, L’Oreal Advanced Haircare Total Repair 5 Damage-Erasing Balm o Kérastase Nutritive Mask para el cabello seco y fino.

Desenredante

    Luego de emprender mi viaje con el decolorante, me di cuenta que sufría un montón intentando desenredarlo. El especialista Robert Dorin explica que en vista de que el blanqueador hace que el cabello se vuelva quebradizo, es “más susceptible a enredarse, provocando el efecto nido de pájaro”. Para contrarrestar este efecto, yo utilizo Living Proof Restore Perfecting Spray; un spray con fórmula ligera que proporciona suavidad, fortaleza y brillo al cabello minimizando la rotura al momento de desenredar el cabello humedecido. De verdad es uno de mis productos favoritos, siento que ha sido vital para recuperar la textura de mi cabello y ayuda enormemente a desenredarlo, siendo este mi problema número uno.

Protector de Calor

    El cabello decolorado por estar poroso y reseco, está más vulnerable al uso regular de secadores, planchas o rizadoras. Por eso, como cualquier colorista o estilista te dirá (hola @indi.hairstyles), un protector de calor es clave para evitar puntas abiertas, defender el cabello de las quemaduras y reponer la humedad perdida durante nuestro régimen diario. A pesar de que el antes mencionado Living Proof Restore Perfecting Spray posee estas propiedades, yo lo complemento con el Tresemmé Thermal Creations Heat Tamer Leave-In Spray. Este aerosol es de consistencia ligera pero protege eficientemente contra daño producido por el calor; dejando tu cabello suave y brillante.

Aceites

    Los aceites naturales ayudan a cerrar y suavizar la cutícula del cabello; reduciendo la evaporación de la humedad y brindándole una apariencia más brillante y saludable. Sin embargo, no hay que abusar de este producto y colocarlo exclusivamente en la parte media y puntas del cabello, ya que los aceites naturales no son solubles en agua y tienden a dejar un residuo. “Cuando sales al sol, este calienta la capa de aceite que, a su vez, calienta la estructura interna del cabello y luego se va toda la humedad”, establece Rod Anker, estilista australiano. Yo utilizo Ogx Coconut Milk Anti-Breakage Serum, ya que además de hidratante, considero que su consistencia ligera me permite aplicarlo en mi cabello con facilidad de forma equitativa.

    Si quisieras implementar aceites naturales como el aceite de coco, aceite de ricino o algún otro, lo recomendable es utilizarlo de mascarilla reparadora. Aplícalo de medias a puntas y déjalo reposar por 30 minutos. Luego, al momento de retirarlo, primero aplica shampoo sin mojar el cabello para retirar con más facilidad y luego procede a enjuagarlo normal.